El tema del streaming ha cobrado mucha fuerza en los últimos tiempos, sobre todo a raíz del confinamiento. Se ha convertido en uno de los elementos básicos para el audiovisual en nuestros días. Y está aquí para quedarse.
Sin embargo, puede parecer un poco confuso todo el tema técnico que conlleva realizar un streaming. Por ello, hemos querido preparar este artículo, repasando las necesidades básicas a la hora de preparar un streaming.
Un equipo de streaming para principiantes es bastante sencillo. Necesitarás una cámara, micrófono, iluminación y una conexión a Internet estable.
Cámara.
Cuando estás empezando con el streaming, una webcam puede hacer el papel de cámara siempre que alcance un mínimo indispensable de calidad Es decir, que por lo menos llegue a 720p – 24 fps.
Hay muy buenas webcams que alcanzan unas calidades de 1080p aceptables, pero también hay que decir que, en los últimos años, los precios de estos pequeños dispositivos se han disparado a raíz, de nuevo, del confinamiento.
Un salto de calidad importante es usar una cámara profesional de vídeo para enviar la señal al ordenador, pero requerirá generalmente de una capturadora de vídeo. Las hay de muchos rangos de precios, pero mi consejo es que, si tienes una cámara buena, compres una capturadora buena. Es una lástima echar a perder calidad de imagen por ahorrar unos dineros.
Audio.
Como generalmente pasa en el audiovisual, hay una tendencia a cuidar más la imagen que el sonido, sin darse cuenta de que, con eso, se degrada el producto y baja enormemente la calidad. En el streaming no es una excepción. Descuidar el audio durante una trasmisión es inaceptable, y siempre has de tener en cuenta la calidad mínima. Desde un micrófono con conexión USB hasta tarjetas de sonido externas para conectar el micrófono vía XLR o, incluso, llegar a conectar una mesa de audio si el evento lo requiere.
Iluminación.
Tanto si la transmisión es desde un pc en tu casa como si estás transmitiendo un evento, siempre que haya una cámara delante tienes que cuidar la iluminación. Las opciones obviamente varían. Por ejemplo, para iluminar una habitación o una persona frente a un ordenador, con unos pequeños focos led o, incluso, con algún anillo de luz (que tan de moda están ahora), se puede solventar. Sin embargo, para un evento más complejo requerimos de material de uso profesional como, por ejemplo, un kit de iluminación de tres puntos (principal, fondo y relleno, al igual que en el vídeo).
Red.
Esto es bastante probable que no dependa de nosotros la mayoría de las veces, pero siempre que se pueda hay que asegurar una conexión por cable, para evitar cortes o caídas, así como una velocidad estable de red para mantener una calidad de vídeo adecuada. Una referencia para tener en cuenta sería 3 Mbps para 480p, 6 Mbps para 720p y 13 Mbps para 1080p.
Esto sería lo más básico para tener en cuenta a la hora de gestionar un streaming, en otros posts os detallaremos más temas como qué capturadoras utilizar, las principales plataformas o cuestiones más técnicas como el bitrate, las tasas de carga y refresco, el buffer de repetición, VODs…
Esperamos que el artículo os haya parecido útil, si queréis echar un ojo a nuestros trabajos os dejamos por aquí nuestro portfolio y nuestras playlists de YouTube y Spotify. Siempre tened en cuenta que un streaming se puede hacer de muchas maneras y a muchos niveles, y una calidad profesional requerirá un material profesional.